Diada de Sant Jordi

La Diada de Sant Jordi es un día muy especial. El ambiente que se respira en las calles es de alegría. Y la verdad es que es un día que a mí siempre me ha gustado mucho.

Recuerdo cuando era pequeña ir siempre con mi madre a buscar algún libro interesante que leer… He devorado tantos… Pero los que compraba en el día de Sant Jordi los recuerdo quizás con más cariño: libros de aventuras, de misterio… Poder descubrir una historia diferente en cada libro es un recuerdo bonito que guardo de mi época adolescente. Por aquél entonces atesoraba más el libro que no la rosa que me pudieran regalar.

Un día que debería ser festivo, y a pesar de que no lo sea, es así como se siente cuando sales a la calle, aunque sea bien temprano. Todo se cubre de puestecitos de rosas y de libros y de gente interesada en una u otra cosa (¡o en ambas!). Ese gentío por las calles me encanta. Habrá gente que no lo disfrute, pero el 23 de Abril de cada año, para mí es un día que disfruto mucho. El día que se celebra el patrón de Catalunya (además de serlo de otras comunidades autónomas), también se conoce como el día de los enamorados. Es por esto, que según la tradición, se regala una rosa roja a la mujer amada. Esto, al igual que la venta de libros, es una oportunidad de negocio para muchos, como lo son otros días señalados del año: San Valentín, Navidad o el día de Reyes…

Sin embargo, sin entrar en estos temas, sigo creyendo que la rosa y el libro hacen buena pareja y que es un día hermoso en el que sencillamente salir a pasear, aunque no haya intención de comprar nada, y compartir ese ambiente festivo con la gente, ya vale la pena.

Lo que sí quiero señalar es que las rosas que hay en estas fotos no son las típicas rosas que encuentras en los puestecitos. Estas rosas son de un rosal muy especial, cuidado cada año con mimo y cariño y eso se nota… Cuando llega esta época, no puedo evitar robar una o dos rosas de ese rosal y disfrutar de un olor verdadero. Ese olor en el que hundes la nariz entre los pétalos y que te envuelve es algo que no se huele en ninguna de las rosas de la Diada.

Con estas fotos, como es algo difícil poder transmitiros cómo huelen, como mínimo las comparto para que podáis ver la suavidad de sus pétalos y la belleza de su color.

¡Feliz día de Sant Jordi!